Entre disomnias y parasomnias II

Sigo angustiado y maravillado por el universo que gira alrededor del sueño. A continuación les expongo las disomnias, sobre el insomnio ya hablé hace 2 entradas:

Narcolepsia. También conocida como el mal del sueño, síndrome de Gelineau o epilepsia del sueño, es caracterizada por momentos de extrema somnolencia durante la etapa de vigilia (vigilia es cuando se está despierto). El invidivuo que sufre de esto (actualmente son muy pocos entre la población) puede estar completamente despierto y de un momento para otro caer en un sueño profundo, para despertar después confundido y desorientado. Se debe a que por las noches no se puede dormir profundamente y en el día el cuerpo trata de compensar eso. Para ver un ejemplo de ello, ver el siguiente video:

Hipersomnia. Cuando leí los síntomas de esta disomnia pensé inmediatamente que yo podría tener esto (y también en llamarla el mal del gato) ya que cuando consigo dormir se me hace dificilísimo levantarme. Se caracteriza por largos periodos de sueño o cuando dices «hoy no me quiero levantar». Aunque también viene acompañada de somnolencia durante el día. Como ya dije, es considerado un trastorno del sueño aunque digan por ahí en mi pueblo le llaman hueva.

Síndrome de apnea-hipopnea. Según lo que investigué es cuando uno ronca. Roncar es malo porque despiertas a otras personas y ya dije que dormir es un placer y una necesidad. Los problemas van más allá de que te manden a dormir a la sala o los divorcios, ya que el que sufre de esto no duerme bien por las noches. Los síntomas son: trastornos respiratorios, ya que no llega de manera correcta el oxígeno a los pulmones, cardiovasculares y psicológicos.

Síndrome de las piernas inquietas. Aunque suene divertido no lo es. Este viene con sensaciones de cosquilleo o de animales que suben por las piernas haciendo que quien lo padezca tenga la necesidad de estar moviendo los pies mientras se descansa. Afecta al 8% de la población mundial.